La semana pasada ha sido una semana llena de despropósitos en el plano político. Continúa el tema de las infraestructuras y se les ve el plumero a algunos personajes, el presidente Zapatero con Z de chapuza que se atreve a hacer coña con el tema de cercanías, los Mossos que reciben órdenes de no hacer nada ante los violentos de extrema izquierda en Barcelona, no vaya a ser que les vuelvan a hacer falta para alguna campaña si el PP gana las elecciones en Marzo. El sr. Alvarez que dice que su organización la U.G.T. no protesta por cercanías para no beneficiar al PP, es decir que le importa más defender a su partido hermano que los cientos de miles de trabajadores que cada mañana nos desplazamos hasta nuestro lugar de trabajo; y Chávez, también con Z que continúa con sus ataques a España, al Rey de todos los españoles y a nuestras empresas.
Sinceramente, y reconozco que mi opinión no es imparcial, todo resulta realmente vergonzoso, os imagináis la que se hubiera liado si en vez de decir lo que dijo Zapatero en el programa de Buenafuente lo hubiera dicho Aznar o Rajoy. ¿Os imagináis lo que hubiera hecho el sr. Alvarez si la ministra de fomento fuese del PP? ¿Os acordáis de lo que llegaron a decir de Julia García Valdecasas cuando las manifestaciones antiglobalización de Barcelona, y los protagonistas fueron los mismos que ahora?
Ante todo ello hecho de menos y envidio a una buena parte del pueblo francés y belga, este fin de semana tanto en Francia como en Bélgica la mayoría silenciosa ha dejado de serlo y han salido a defender a su presidente, Sarkozy, elegido democraticamente y la unidad de su Patria, por la que están la mayoría, en Bélgica.
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